BUKU BASA SPANYOL KAKAIT KARO «ATROPELLAPLATOS»
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atropellaplatos ing pilihan bibliografi iki. Buku kang kakait dening
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1
La escena madrileña entre 1926 y 1931: un lustro de transición
Lo cierto es que La atropellaplatos se parecía a otras muchas "bufonadas" que
hicieron las gracias del público. El crítico de La Voz concedió que la farsa no era
mejor ni peor que otras de Paso y Estremera — "Pudo pasar como la seda, cual
...
María Francisca Vilches de Frutos, Dru Dougherty, 1997
—Y la mía, una atropellaplatos de Ravena —dijo un tercero. —Y la mía una
cortesana de Venecia... Y la mía lo mismo... —exclamaron por turno los quince
hijos naturales restantes. E. JARDIEL PONCELA, ¡Espérame en Siberia, vida
mía!
3
El teatro en Murcia durante la II República
La culpa es de Calderón, de Leandro Blanco y Alfonso Lapena; Para ti es el
mundo, de Carlos Arniches; La atropellaplatos, de Antonio Paso y Estremera; La
Plasmatoria de Muñoz Seca y Pérez Fernández y la obra de Manuel Morcillo ¡
Aquí ...
Fulgencio Martínez Lax, 1997
Era una atropellaplatos. CLAVELLINA.- Envidiosa. Su almidón casi ni se notaba,
y los bordados parecían caracoles vivos. DIONISÍACA.- Era una puerca
planchando. CLAVELLINA.- Tenía cola de hombres con cuello duro.
DIONISÍACA.
Manuel Martínez Mediero, 1999
La atropellaplatos - 63. La aventurera - 6. La aventura de Irene - 124. La calle (
Street Scene) - 167. La capitana - 47. La caraba — 3. La cárcel modelo o La
venganza de un malvado - 156. La casa de la bruja - 355. La Casa de la Troya -
97.
6
Desde Andalucía: mujeres del Mediterráneo
Las mujeres receptivas a los cambios eran calificadas, como nos recuerda
Amando de Miguel (1995:209 y 245) de “horizontales” o “desvestibles” en clara
alusión a su pretendida liberalidad sexual o de “atropellaplatos”, ridiculizando
sus ...
... Genio y figura, Gloria pura, Guitarras y bandurrias, ¡Haz el favor de morirtef,
Historia natural, Jeremías y Joselito, Juanito y su novia, La alegre trompetería, La
alegría de la huerta, La alegría de vivir, La atropellaplatos, La bendición de Dios,
...
Buena parte del público, que se dedica a canonizar asesinos y dignificar
ladrones, aplaude la gracia de Vidal. a su novia, que es una atropellaplatos
usada, se le han presentado en Niza varios aspirantes a su pringosa mano, y
Vidal recibe ...
9
Al cabo de los años mil ...: novela
Añádase a lo dicho que don Romualdo pecaba de rijoso y lascivo y sepirraba
por perse— guir a todas las atropellaplatos que entraban a surtirse en su
comercio, y que era público y notorio que no respetaba más que a las que
dormían bajo ...
José María de Acosta, 1922
10
La mariposa. El chico del panadero. El trasplantado. ...
... aquella atropellaplatos; una balada popular un tanto canallesca, en la que
figura una muchacha que engaña á su amante, y cuando éste se va lleno de
tristeza á hacerse soldado de la Gira groga, varia de intento al oir á un camarada
que ...
