BUKU BASA SPANYOL KAKAIT KARO «CIMBRADOR»
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—Bueno, chico, adiós —nos dice ella al darnos la espalda y alejarse, ya con
menos rumbo en el lucimiento de su bata, su mantón y su cuerpo lleno y
cimbrador. —Abur, chica —respondemos a dúo Pan de Flauta y yo; y doblados
por el ...
Carlos Loveira y Chirino, 2010
2
Invitación al baile: arte, espectáculo y rito en la sociedad ...
En su pupila el fulgor se halla del astro del día; el del piñón, su color, y su talle
cimbrador, y su voz armonía. Manuel Caballero, a treinta y tantas damas de
belleza prestigiosa, concretando nombre y apellido, les brindó rango literario. (
54) El ...
Clementina Díaz y de Ovando, 2006
3
Alma chilena: obras completas 1912
... lejanas de la muerte! A UNA MORENA Tienes ojos de abismo, cabellera llena
de luz y sombra, como el río que deslizando su caudal bravío, al beso de la luna
reverbera. Nada más cimbrador que tu cadera, rebelde a la presión del atavío.
Carlos Pezoa Véliz, Naín Nómez, 2008
Aceptó la muchacha, y se levantó a lucir su gallardía, la esbeltez de aquel talle
cimbrador y elegante. Estaba Leonor en una de esos ratos serios, en ella
rarísimos, y acogió a Gamboa con una sonrisa de simpatía, y no tuvo para él más
que ...
Rafael Delgado, María Guadalupe García Barragán, 1993
5
Guayaquil: una ciudad dentro de otra
... de madera y techado; el de Miguel Gómez, de dos vigas, con baranda de
cañabrava; el de Junín, de tablas, con techo, de cañabrava y tejas; el de Palacé,
sumamente angosto, de madera y cañas y muy cimbrador; el de Arco, en la
carrera ...
6
El saludo de las brujas
Yalomitsa reía candorosamente, hiriendo las teclas, mientras la banda roja
describía espirales y venía a enroscarse al talle cimbrador de Rosario... Al
siguiente día, en la edición de la mañana del periódico La Actualidad, sección
de los Ecos, ...
... tumbadillo de flores rojas, camisa blanca bordada de negro y gargantilla y
zarcillos de cristal color de rubí, danzaba con toda la gentileza y donaire que
eran de esperarse de su talle cimbrador. Bruno, doblados sobre los hombros los
...
¡Oh! Si vinieras, ¡cuánto te querría! 25 Si a mi labio sediento Brindaras otra vez tu
ardiente boca, Un instante no más... sólo un momento Fuera para tu amor mi
vida poca; Tu talle cimbrador bajo mi brazo 30 Tu talle dócil. ms. 3, fols. 27-28.
Jorge Isaacs, María Teresa Cristina, 2005
9
Leyendas mexicanas: cuentos y baladas del Norte Europa, y ...
... Mientras que sale y entra disponiendo Lo preciso al convite, y hechicera El
tontillo abultado va luciendo, El talle cimbrador como palmera, Los negros ojos
de mirar tremendo, La empolvada profusa cabellera, " Sarta de perlas,
prendedor, ...
José María Roa Bárcena, 1862
10
Dïïjoma: el hombre--serpiente--águila : mito uitoto de la ...
... los humanos. Y lo consiente el Águila-antropófaga; ya no volvió a atacarlos,
pero apremia porque le den su garra. Por temor se la ocultan, no sea que,
completo, cometa fechorías. Él les propone que vayan a traer el palo cimbrador,.
[ 111 ]
Fernando Urbina Rangel, 2004
BABAGAN WARTA KANG NGLEBOKAKÉ ARAN «CIMBRADOR»
Weruhi yèn pawarta nasional lan internasional wis ngomongaké lan kepriyé aran
cimbrador digunakaké ing babagan warta iki.
Cuba: el estado de la cuestión
Melancólica pero argumentada respuesta: nada, esperar una chispa imprevisible, un cometa aciago, un terremoto cimbrador, un huracán barredor de tristezas, ... «CUBAENCUENTRO.com, Apr 16»
